jueves, 24 de febrero de 2011

Colonia Juvenil


Capítulo III
Las primeras construcciones
Originalmente yo tenía unos planos que me había regalado el Arq. Jesús Méndez Montalvo justamente para ese terreno, consistían en un área habitacional de 4 o 5 casas cada una con tres recámaras o dormitorios cada una para ocho muchachos, su estancia, comedor cocina y baño.
Por cuestiones de economía se tuvieron que sacrificar algunos detalles arquitectónicos y fue rediseñada la planta habitacional, quedó en una oficina amplia, tres módulos (casas) con cuatro habitaciones, cada una para ocho muchachos. Pensando en que la especialidad de los Ingenieros era construir casas de Interés Social o sea con espacios reducidos, sugerí que cada recámara estuviera planeada para ocho camas individuales con un espacio suficiente entre cada una para colocar un mueble donde los chicos pudieran colocar sus cosas, de todos modos pensaba meter cuatro literas por cuarto pero de este modo quedaría mas espacio para circular. Cada Modulo o casa constaba pues de 4 dormitorios para 8 muchachos cada uno, un baño general con suficientes WC’s, mingitorio y regaderas con muros intermedios; cocina, comedor, estancia y el cuarto o recámara del monitor, casi del mismo tamaño que los de los muchachos, pero con baño incluido.
Estaban terminados los módulos y don Alejandro hizo la observación de que las cocinas podrían representar un gasto adicional en la operación, porque se podría prestar a desperdicios, y otros inconvenientes como su equipamiento y sugirió que se hiciera una cocina general con un comedor adicional también que además propiciaría una mayor convivencia. Estando totalmente de acuerdo con ello y como a don Alejandro le bastaba con tomar un acuerdo para pasar a la acción, ordenó de inmediato la construcción de esa área así como canchas deportivas, dos de Basquetbol con medidas reglamentarias y una de Futbol rápido. Para el mes de Agosto de 1992 estaban terminadas tanto el área habitacional como la cocina y comedor, las canchas llevaban ya un avance muy importante; El cupo originalmente pensado era para 100 muchachos varones, aunque el comedor y cocina se diseñaron para 200 personas.
Ahora sólo faltaba ocupar las instalaciones.

Los primeros meses
Era un hecho que los primeros muchachos que se incorporarían a Colonia Juvenil serían los jovencitos de la Fundación que estaban cursando o por cursar la secundaria, era el Mes de Agosto de 1992, Claudio Carrillo había comenzado su campaña empezando por algunas instituciones como el Albergue Infantil Rafael Nieto que dirigían todavía las Hermanas de la Caridad de María Inmaculada, de ahí se presentó Luis Oscar Quiroz a quien podemos considerar el primer “colono”, porque fue el primero en llegar e incluso vivió ah colonia algunos días como único inquilino, Claudio le consiguió lugar en una Secundaria, en seguida llegaron mis muchachos de la Fundación y se concretó un pequeño grupo de 12 chicos.
Ya con los muchachos en Colonia se incorporaron, por invitación de Claudio, como monitores, otros dos jóvenes dirigentes Scouts, uno de ellos estudiante de Leyes y el otro no recuerdo pero también era estudiante universitario.
Parte del perfil que habíamos diseñado para monitor era que fuese estudiante o tuviera alguna actividad laboral externa, se trataba que los muchachos les consideraran modelos a aseguir.
En septiembre de 1992 los muchachos ya iban a la escuela, si mal no recuerdos asistían a diferentes planteles, Claudio firmaba como tutor, se encargaba de las compras de útiles escolares, despensa, enceres y artículos de limpieza así como de aseo personal, nos presentó a don Alejandro y a mi unos diseños de logotipo para Colonia Juvenil, escogimos uno que representaba un muchacho saliendo de Colonia Juvenil al mundo y que se utilizó tal cual durante poco mas de 15 años, el creador de ese diseño y me enteré 18 años después fue el D.G. Armando Acosta Díaz de León.
Los muchachos que auxiliaban a Claudio les mantenían ocupados muy al estilo Scout, incluso se usaban formaciones y toques de silbato para llamar a cada actividad, así mismo les auxiliaban en sus tareas escolares.
En una reunión de consejo se invitó a los monitores, a don Alejandro no le pareció correcta la forma como se presentaban con ropa informal, pantalón corto y un tanto cuanto desaliñados, los cuestionó y después me dijo que no le agradaban, que no le parecía que fuesen modelos a seguir por los muchachos, yo le hice ver que eran muchachos sanos y muy responsables, pero par él el aspecto era algo importante a considerar.
Si hubiera vivido para ver al equipo que llegó con el actual director incluido este (el Pollo), no hubiera permitido que pusieran un pie dentro de Colonia Juvenil; los primeros monitores son hoy en día profesionistas y ciudadanos muy respetables; ellos permanecieron en Colonia un tiempo, mejoraron su aspecto pero el entusiasmo con que llegaron se fue debilitando.
Otra de las actividades que realizó Claudio fue un boletín y la promoción en diferentes comunidades rurales tanto del altiplano como de la Huasteca, en uno de esos viajes volcó en la carretera sin mas daños que los sufridos por el vehículo (afortunadamente) Claudio asumió la responsabilidad, mandó repararla y me informó de ese accidente cuando la camioneta estaba de nuevo en operación, yo tnía que informarlo a don Alejandro que al saberlo se disgustó muchísimo y me dijo:
— Esto no puede ser, necesitamos otro director en su lugar, o lo despides tú o lo corro yo
Habían transcurrido apenas tres meses de haber iniciado actividades en un programa totalmente nuevo, estábamos creando una institución diferente, no se trataba de un albergue o un internado como los que hay tantos, se trataba de crear agentes de cambio, nadie nos estaba enseñando era mucho de ensayo y error, en mi opinión Claudio había demostrado responsabilidad y honestidad.
Hable con Claudio y le informé la decisión al mismo tiempo le pedí que permaneciera en su puesto hasta que tomara posesión otro director.
Le sugerí a don Alejandro que tomara el puesto Verónica Saucedo, él se mostró renuente en principio aunque ya nos había acompañado en algunas reuniones al principio, me dijo que si yo me hacía responsable de ella él aceptaba, a lo que contesté inmediatamente que si, que yo estaría al tanto de su trabajo, que confiaba plenamente en ella porque llevábamos trabajando algunos años y la conocía bien, que además contaba con un equipo de trabajo bien organizado y que todas se dedicaban a la educación.
En Diciembre de 1992 Verónica y su equipo llegaron a Colonia Juvenil, Claudio entregó el puesto y comenzó una nueva etapa que habría de durar poco mas de 10 años.

Nota: Muchas cosas escapan a mi memoria y es probable que confunda algunas otras, por eso les pido a los excolonos de cada época, me corrijan en caso de error y que compartan sus experiencias para contarlas aquí.

2 comentarios:

vianney dijo...

Me agrada tener la oprtunidad de conocer la historia de Colonia Juvenil, siempre tuve la inquietud de saber como fue que inició este proyecto, conocía pero no a fondo, ahora soy una excolona y he de ser sincera, cuando estuve en colonia hace pocos años preguntaba a Don Jose Luis, quien segun yo tenía mas años en colonia que ningun otro directivo, acerca de relatos que alguna vez yo había llegado a escuchar, sin embargo el no pudo solucionar mis dudas, gracias Tio por publicar esto que ahora tengo el placer de leer y conocer como es que inició el proyecto al que pertenecí por 9 años y llevo siempre en mi corazon.
un abrazo, y saludos, Vianney C. Martínez

Adrián René Contreras dijo...

Viznney:Gracias por leerlos. Sucede que eran muy pocos los que conocían como es que comenzó Colonia Juvenil y me di cuenta de ello porque los directivos actuales no tienen idea de como fue. En el transcurso de esta historia tendré que relatar algunos acontecimientos que tal vez molesten a algunas personas, pero en honor a la verdad tendré que hacerlo. Mucho te agradeceré a ti y a quienes hayan vivido en colonia, que si me equivoco me lo hagan saber para corregir, así también si omito algún dato me lo recuerden.
Saludos cariñosos